Estando en un foro de lucha contra la adicción del tabaco, tuve suerte de conocer a mucha gente, a la cual recuerdo con cariño. Me gustaría empezar este nuevo camino con el mismo cuento que allí disfrutamos, el de las 2 ranitas... que tanto nos ayudó.
"Las 2 RANITAS", de Bucay
"Este cuento va dirigido a todas aquellas personas que empiezan la dura batalla de dejar de fumar, y sobre todo a aquellos que en un momento determinado creen que no pueden y ceden."
Dos ranitas cayeron en un recipiente de nata. Se hundían, ya que era imposible nadar o flotar en aquella sustancia. Las dos ranitas patalearon y patalearon, pero era inútil, solo conseguían hundirse.
Una de ellas dijo: no puedo más, es imposible salir de aquí, no se puede nadar, y como voy a morir, para que voy a prolongar mi sufrimiento. Por ello, dejó de patalear y se hundió hasta el fondo del recipiente, dejando de existir.
La otra ranita, mas tozuda y persistente, se dijo a si misma, prefiero luchar hasta el final, y siguió pataleando y pataleando hasta que de pronto, a las pocas horas, de tanto patalear, la nata se convirtió en mantequilla, y sorprendida, dio un salto y patinó sobre la mantequilla, llegando al borde del recipiente y saliendo de el, fue libre.
La moraleja y mensaje de este cuento, es para cada uno de vosotros. Un abrazo, y espero que os sirva. Jabo
"Las 2 RANITAS", de Bucay
"Este cuento va dirigido a todas aquellas personas que empiezan la dura batalla de dejar de fumar, y sobre todo a aquellos que en un momento determinado creen que no pueden y ceden."
Dos ranitas cayeron en un recipiente de nata. Se hundían, ya que era imposible nadar o flotar en aquella sustancia. Las dos ranitas patalearon y patalearon, pero era inútil, solo conseguían hundirse.
Una de ellas dijo: no puedo más, es imposible salir de aquí, no se puede nadar, y como voy a morir, para que voy a prolongar mi sufrimiento. Por ello, dejó de patalear y se hundió hasta el fondo del recipiente, dejando de existir.
La otra ranita, mas tozuda y persistente, se dijo a si misma, prefiero luchar hasta el final, y siguió pataleando y pataleando hasta que de pronto, a las pocas horas, de tanto patalear, la nata se convirtió en mantequilla, y sorprendida, dio un salto y patinó sobre la mantequilla, llegando al borde del recipiente y saliendo de el, fue libre.
La moraleja y mensaje de este cuento, es para cada uno de vosotros. Un abrazo, y espero que os sirva. Jabo
2 comentarios:
Este ya lo conocia..................
Un beso
Hola Montse. Me alegro mucho de que una persona como tu este aqui, con nosotros. Ojalá te guste el blog. Besos. Jabo
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